Soy un privilegiado y vivo bien, lo reconozco. el pasado fin de semana he estado dialogando con diferentes personas sobre multitud de temas mientras tomaba una cerveza en la piscina. Grecia ha sido el tema más repetido, pero no el que más me ha llamado la atención.

Se paró un vecino para hablar sobre cosas intrancendentes y terminamos hablando sobre intraemprendeduría, es decir, emprender dentro de una empresa. La conversación no paso de las trivialidades de cortesía que cada uno se apunta a decir cuando tiene una empresa: «ah, pues eso ya lo hago yo», «mis trabajadores son libres de decirme lo que quieran y poner ideas en funcionamiento», etc. No me lo creo y es más, si el 10% de los trabajadores de este país que trabajan por cuenta ajena hubieran sido intraemprendedores, no tendríamos problemas laborales estructurales tan profundos.

Para que un currito sea intraemprendedor, deben suceder tres cuestiones:

1. Que la persona se sienta libre de decir y hablar y de poner sobre la mesa nuevas ideas.

2. Qué la empresa lo permita y lo potencie.

3. Que tenga medios, plataformas, para poder pensar y desarrollar dichas ideas.

Una vez que existen todas estas  posibilidades, se tiene que articular las respuestas adecuadas, tanto si es para emprender esa idea, como para desecharla. Es decir. La emprendemos y la lideras o no la lideras y por qué y la desechamos y por qué. Soy un poco primitivo en todos estos procesos, pero soy amigo de la cantidad, pues es la base principal de la calidad. ¿Hay muchas ideas? tenemos la posibilidad de tener alguna buena. Así funcionaba la extinta Unión Soviética en el deporte.

Pero hete aquí que aparece un elemento prioritario en este contexto y es la gestión del NO y la del SI. Vamos a hablar de las del NO.

¿Se debe sacar adelante cualquier idea de los trabajadores? evidentemente no, pero si asumes esta forma de trabajo y relación con los empleados, entonces asumes una fórmula de justificación, que se convierte en una herramienta verdaderamente más importante en la propia intraemprendeduría. Gestionar la negación es la mejor forma de intraemprender. Un NO porque no hay dinero no permite emprender en las empresas. Un NO, porque no es el momento, tampoco, un NO porque es una idea descabellada, evidentemente, tampoco. En fin, que las razones del No, permitirán mantener:

1. La confianza en la empresa y en los cargos responsables y

2. La calidad y variedad de las futuras ideas.

Cuando dices esto, entonces viene la respuesta demoledora: «es que para eso no tenemos tiempo. Tendríamos que destinar un departamento a ver las nuevas ideas que surjan» y mi reflexión es: «¿quieres o no quieres que se intraemprenda?» Pues lo siento, pero deberás sacar tiempo para analizar y para responder de manera adecuada para propuesta, es la única manera, entendiendo que no suele haber una partida económica que permita a un departamento pensar y trabajar sobre esto. Esto o disponer de una plataforma que establezca cortes de calidad adecuados. Imagina, aunque ya es posible, que la empresa desarrolle dicha plataforma, donde el trabajador pueda pensar en su idea de negocio y que esta plataforma tenga una serie de pasos que permitan al emprendedor ir alcanzando o superando dichos pasos. No hay que ir a la dirección con cualquier paja mental, si con una paja mental que ha pasado por una criba de pensamiento, competencia, clientes y potencialidad comercial, al menos. Y si resulta que esa plataforma tiene benchmarks adecuados que establezcan los cortes de posible desarrollo, pues será una plataforma con un potencial importante.

No es que la quiera vender, pero es algo así lo que tenemos en Mix Ideas. Entendemos que las pajas mentales valen para generar ideas, pero que una vez que tienes la idea en fase de desarrollo, no se puede seguir generando la idea desde la vaguedad.

Apuesta por que tus empleados intra-emprendan, pero que se lo curren. Aquí te dejo una infografía cachonda con los aprendizajes de Breaking Bad y el emprendizaje.

Lo dicho, si te sientes perdido, necesitas ayuda y quieres algún tipo de apoyo, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. No somos amigos de solucionar problemas, si de acompañarte en la consecución de retos.