La Universidad MIT (Massachusetts Institute of Technology) es una de las mejores consideradas del mundo. Han desarrollado un formato de aprendizaje de programación para niños (y mayores) muy interesante (code.org), donde los niños (y los mayores) podemos ir resolviendo con líneas de código (más visuales) situaciones concretas, más fáciles unas y menos otras. Es altamente recomendable y permite, de alguna forma, entender el formato programación de una forma muy visual. Si tu ya has perdido cualquier interés en este tipo de aprendizajes, al menos enséñaselo a tu hijX.
Me cuenta un amigo que es profe allí que cuando preguntas a algún alumno algo tan sencillo como «¿tu que haces?», lo que te vienen a responder es todo menos sobre lo que estudia, es algo secundario: «Pues estoy en una startup haciendo…» «Desarrollo actividades deportivas», «…» En fin, que hay que decirle algo así como: «Vale, pero ¿también estudias?» y te responderán: «ahhh, si claro, además, también estudio».
Cuando hablan de modificar el modelo educativo, hay que empezar por esa multi-tarea. La capacidad y habilidad para entender que ya no hay un trabajador para una tarea, sino que somos algo así como «tiendas de chinos», que tenemos que tener de todo, pero tenemos que estar mejor ordenados que los chinos, aunque ellos son capaces de ordenar el caos bastante bien. Y aquí es donde entra la tecnología, la nueva tecnología, que permite hacer muchas cosas.
Para esto sirve el apredizaje tecnológico, para crear y jerarquizar. Y además entender de qué manera funciona la mente de un programador, que siempre viene bien para poder hacer proyectos digitales y tecnológicos. Tiene una gran virtud y es ser capaz de poner límites a los sueños, me explico, cuando pensamos lo que queremos ser y nos ponemos un fin, esto limita, aunque este límite muchas veces sea tan vasto que nunca lo consigamos. Me sigo explicando: el aprendizaje tecnológico plantea metas cortas y concretas y es más, cada meta lograda es un hito y permite encontrar, es como ir haciendo planillas de sumas y restas, pero en cada una de ellas, en cada una de esas planillas, alcanzamos una meta concreta que conlleva unos resultados. Es un formato potente para entender la creatividad como el primer paso de la formación, o mejor, el no asesinato de la creatividad.
Y todo esto viene a que la tecnología no solo nos resuelve la vida (o nos la complica), también nos sirve como otro formato de aprendizaje. Debemos tener en cuenta que hasta hace relativamente poco, los informáticos eran considerados cuadriculados, cerebritos sin alma, pero hoy hemos aprendido que no, que algunos son tan cuadriculados como cualquier otra persona de otra disciplina, y que tantos otros tienen increíbles capacidades creativas (porque crean, movimiento, diseños que mejoran nuestra vida, etc.). Y estar al tanto del progreso de los últimos 20 años y ser co-partícipes en su desarrollo, mientras el resto de los humanos estábamos tragando la tecnología que ellos iban desarrollando, ha puesto a esta gente en un escalón de conocimiento superior y han sido capaces de ir desarrollando nuevas herramientas y técnicas. Debemos tener en cuenta que las personas que hoy tienen 30 o 35 años han desarrollado un porcentaje extraordinario de tecnología que hoy estamos utilizando, es decir, que los cambios hace 50 años eran más lentos, hoy son tan rápidos que no somos conscientes que la tecnología que hoy usamos es en gran parte inventada en los últimos 10-20 años.
Y para terminar, bucea en code.org, juega con los marcianitos y crea cierta adicción, adicción que mejorará tu visión espacial, la capacidad de procesar y además te lo pasarás bien.
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